martes, 26 de noviembre de 2013

LA EDUCACIÓN COMO VÍA DE ESCAPE

Si al final de esta crisis queremos tener un modelo productivo moderno acorde con el resto de países de Europa, tenemos que hacer inversiones y una de ellas es en educación.
La educación infantil ha experimentado un aumento considerable, la escolarización se incrementa y los centros privados son mayoritarios en este tipo de educación.

La educación primaria y secundaria, con la obligatoriedad de escolarización has los 16 años, da lugar a un abandono escolar excesivo. Las sucesivas reformas no han paliado el deterioro de la formación cuando nos comparan con otros países. Hay que exigir más memorización y esfuerzo, idiomas y facilitar el traspaso a la formación profesional de cierta parte del alumnado.
La enseñanza terciaria, universitaria, en gran parte pública, donde los alumnos pagan una matrícula muy inferior al coste por alumno. Además el fracaso escolar es grande.

La universidad privada tampoco de gran calidad en España, donde recogen a los alumnos con rentas más altas y con peores notas que no han podido acceder a la universidad pública.
La llegada del plan Bolonia no ha mejorado la situación, se ha uniformado todas las carreras a grados de 4 años y no se ha tenido en cuenta la salida de las mismas. La FP de grado superior es muy escasa, cuando debería ser una alternativa excelente al excesivo número de universitarios que hay en España.

En España tenemos la mayor parte de universitarios de Europa, en carreras que no tienen demanda laboral, con una FP devaluada, con baja formación en idiomas.
Tanta reforma en la educación, no ha resuelto el problema, cada partido ha partido de sus ideologías en vez de pensar en el bienestar social.

Necesitamos una educación pactada por todos los partidos.

También está mal organizado el tema de las notas de corte, dado que personas que quizás sí que están dispuestas a darlo todo en determinada carrera por no tener suficiente nota no pueden aprovechar esa plaza y otra persona se toma a pitorreo esa carrera o se mete sin gustarle demasiado por el simple hecho de ``estudio medicina´´ y al año quitarse. Debería tomarse la primera opción de cada persona e ir mirando la nota de corte y ocupando plazas, pero ver la primera opción, así una persona que quiere estudiar fisioterapia en la primera opción con un 10’8 pueda tener plaza y que no se la quite una persona que quiere medicina en la primera opción con un 11’7 dado que esa persona al segundo año se cambiará y dejará plazas libres en fisioterapia ya imposibilitadas a ser ocupadas.

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