La llegada de la crisis encuentra a nuestra
justicia mal preparada.
Debemos aprender de los errores que se han
producido en otros países de nuestro entorno, más avanzados que nosotros en
temas jurídicos.
Con la crisis han aumentado los desahucios,
los impagos, juicios por despido, etc…por lo que la justicia ha hecho más lenta
su respuesta. Esto anima a los incumplidores en su qué hacer diario, ya que la
lentitud de la justicia juega a su favor. Hay otros funcionarios públicos que
podrían hacer el trabajo de los jueces como los notarios, en temas relacionados
con la ejecución hipotecaria por ejemplo.
La creación de los juzgados de lo mercantil
tampoco ha resuelto el problema, por una parte la falta de especialización de
los jueves y por otra parte el colapso producido en estos juzgados por la
llegada masiva de concursos. La llegada de la reforma de la ley concursal ha
mejorado algo pero no lo suficiente la situación.
La aplicación de la defensa de la competencia
es un paso adelante, evita el abuso de los monopolios, las posiciones de
dominio, etc…vigilado por la comisión nacional de la competencia.
La fama que tiene la justicia en nuestro país
es de lenta y anticuada.
Las instalaciones suelen ser edificios viejos,
aunque recientemente se están realizando aperturas en las ciudades de la justicia mejorando este
aspecto.
La crisis ha dado lugar a que haya gente que
se despida de sus trabajos, de otras que devuelven los pagarés, dejan de pagar
la hipoteca, empresas que entran en concurso de acreedores, etc…Todo un sinfín
de situaciones que se dirimen en los juzgados, y ante tal avalancha se colapsan
y se tarda más en responder a las necesidades de los ciudadanos.
No cabe duda que la creación de los juzgados
especializados como el mercantil ha de ser buena cosa, sobre todo si los jueces
que lo llevan son especialistas en la materia.
En una crisis cada vez hay más diferencia
entre intervinientes en la economía, una gran empresa y un pequeño proveedor,
por eso es bueno que exista control en el consejo nacional de la competencia
para evitar abusos del mayor contra el pequeño.Wikipedia